sábado, 9 de abril de 2016

LAS OLAS Y LAS ROCAS







Tenaz. Perseverante. Minuciosa.

Así es la lenta y terca

embestida de tus olas

contra mis rocas.

El mar no tiene prisa.

Se sabe eterno vencedor

en la batalla que el tiempo

libra contra el deseo.

Y las rocas sólo pueden,

antes o después,

ante su inexorable empuje

acabar cediendo.

2 comentarios:

  1. Cuanta perspicacia y empuje tiene esa...mar...
    Preciosa poesía, alfredo, me encanta versar a la mar.
    Besos, compañero.

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    1. Qué puedo decirte, amiga, soy isleño, nací, crecí y he vivido toda mi vida rodeado por el mar desde los cuatro puntos cardinales. Incluso en la más alta montaña de mi isla se huele la brisa marina. Así que es imposible que Él no me acompañe a todas horas, y no se refleje en cada una de mis palabras.
      Besos, compañera.

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